Supay

(demonio, diablo, lucifer: ser de toda malicia y crueldad)

La muerte, es un tema que muchos adultos no quieren mencionar, pero los adolescentes que están teniendo conflictos por el cambio de hormonas, se convierte en su tema favorito, todo con el propósito de llamar la atención. Morir, como todo adolecente yo siempre me preguntaba cómo sería ese momento, de cuán doloroso sería el morir, pero al final, crecí, y como todos me integre en la sociedad, por lo que la gente de mí alrededor vive la vida ocultando el hecho de que son mortales, y no quieren pensar en el hecho de que en cualquier momento pueden morir.

¡En verdad que mi mundo apesta!

No me importa lo que piensen los demás, pero que impongan esa farsa de vida a las nuevas generaciones es, enfermizo. Puesto que yo crecí con ese pensamiento lo cual me hizo creer que era diferente, creí que era especial, creí que sí tendría cuidado eso nunca me pasaría a mí (O bueno, ese es el objetivo de esta avanzadísima sociedad), por lo que nunca imagine, que cuando la conociera a la chica de mis sueños, la vida me hiciera darme cuenta de lo equivocado que estaba y de lo fácil que un degenerado te puede quitar la vida en un parpadeo.

Pero bueno, eso no importa ya, ahora estoy bañado en sudor en medio del bosque tras mi presa…

En donde debería empezar mi historia, de cómo morí o de cómo estoy viviendo mi nueva vida. Mmm…

Iniciare de cómo empecé a tomar conciencia de este mundo.

Yo, recuerdo que estaba tirado en el suelo y sentí que estaba rodeado de bebés, por lo que no podía visualizar mi entorno ya que estaba demasiado oscuro, mi cuerpo era pesado y torpe, principalmente mi cabeza puesto que mi cuello era demasiado débil para sostenerla, pero, al verme a mí mismo, me hizo darme cuenta de que era un bebé como los otros

Al principio, no entendía la situación en la que me encontraba, y empecé a creer que estaba en un sueño. Por ende, decidí reflexionar sobre los acontecimientos antes de quedarme dormido, entonces, me acordé de ella. Imagino que ya se darán una idea de lo hermosa que era, pero mujeres hermosas las encuentras volteando una esquina, estudiando en la universidad, o a veces atendiendo un puesto de comida rápida o en una oficina, bar, restaurante, café etc. etc. y te dices wow, que hermosa mujer, quiero que sea la madre de mis hijos, o algo por el estilo…

Pero en cuanto te acercas a conversar con ella, sales espantado de la mierda que brota de su boca, muestra de que no tienen nada en la cabeza. Pero ella era distinta, aparte de ser muy hermosa; una morena de piel canela, con piernas largas y firmes, con un torso que provoca abrazar y de pechos regulares, (ni grandes ni muy pequeños) con cabello largo, ojos grandes y negros, de labios gruesos y sensuales, de parada firme y sin maquillaje, (lo que indicaba, su confianza en sí misma).

Cuando me la presentaron, no le di mucha importancia porque caí en la ignorancia del prejuicio. Pero todo lo de nuestro alrededor desapareció cuando comenzamos a conversar, ya que hablamos de temas muy variados, algunos divertidos, otros de misterios, y otros muy tristes. De repente era algo aterrador los muchos conocimientos y experiencias que poseía, pero era fantástico estar con ella, lo cual nos llevó a la ruina de nuestros destinos.

Puesto que no sentimos lo tarde que era, y de que caminamos por un sitio solitario, (uno que no recorrería por lo prudente que soy), pero estaba tan sumergido en la conversación que ambos teníamos nuestros sentido de la precaución desactivado, llevándonos ante un grupo de sujetos de los cuales emanaba un fuerte aura de hostilidad.

No pudimos ni reaccionar cuando nos atacaron, (eso era una muestra de que en las películas de acción, tienen cero de realismo) por lo que yo intente pelear, pero me redujeron en dos movimientos, en cuanto a ella si presentó buena batalla, pero al tomarme de rehén, la redujeron y empezaron a abusar de ella delante de mí.

Convoque a la ira para que me ayude, como en los mangas y animes que miro a menudo, pero fue una actuación lamentable, la cual solo provocó la ira de mi captor, impulsándolo a castigarme con una puñalada en mi corazón.

No sentí nada mientras miraba, como de mi pecho florecía una mancha de color carmesí, por lo que poco a poco el mundo a mi alrededor comenzó a oscurecer. Es como lo que leí en una novela de artes marciales, “no te preocupes cuando sientes dolor, preocúpate cuando ya no lo sientas, porque ya estás muerto”.

(En verdad que es interesante esta sociedad de mierda en el que vivimos, no te hace ver lo patético e insignificante que eres, hasta que te pasa algo terrible, del cual ya no hay retroceso).

Ante los recuerdos, comencé a sentirme patético, ¡Patético, patético, en verdad que patético soy!, ya que no comprendo cómo es que termino así ¿Qué he estado haciendo todo este tiempo? Conseguí un buen trabajo, mi jefe y mis compañeros me respetaban, tuve buenos amigos, solo me faltaba conseguir una buena mujer para hacer una familia y mi vida ya estaba realizada.

Una buena mujer. Y volví a recordar en el momento en el que ella era reducida por eso malditos sujetos y de que yo no pude hacer nada para ayudarla, en verdad no pude hacer nada. Estos recuerdos me llenaron de ira y soledad, por lo cual, rompí en llanto, llore y llore hasta que me quede dormido...

Cuando desperté, sentí que mi cuerpo ya era un poco más fuerte, entonces comencé a ejercitarlo para poder incorporarme y ver a mi alrededor. Tras no sé cuánto tiempo, me logre sentar y pude ver mi entorno, aunque mi cabeza aún era muy pesada y mis movimientos aún eran torpes, pero tras concentrarme en mi vista y ver a mi alrededor,

me llené de pánico, puesto que estaba rodeado de pequeños monstruos verdes, y lo más impresionante de todo, era que yo era uno de ellos.

Decidí concentrarme en mi respiración, para calmarme y luego me puse a reflexionar sobre los acontecimientos, recordando que después de morir estuve flotando en un mar de agua tibia cubierta de un aura sombría llena de ira, tristeza y dolor, yo no podía ver, pero sentía que era aborrecido por una presencia muy hostil. De vez en cuando, recordaba escenas del abuso que sufrió esa chica, y a veces la sentía en mis propias carnes, pero lo raro era que sus rostros eran diferente, o era por lo borrosos de los recuerdos…

Bueno, luego el agua empezó a drenarse arrastrándome con ella hacia un entorno sólido y frio, del cual no me podía mover, lo que hizo, llenarme de miedo, por lo que grite con todas mis fuerzas, hasta que sentí que alguien me cogió y me llevo entre estos bebes.

Entonces.

¡Entonces, yo!

¡Pero eso es imposible!

¡Pero lo estoy viento y sintiendo!

¡Yo entonces, he vuelto a empezar!

Comprendí.

De que yo he vuelto a nacer.

He vuelto a nacer en otro mundo, un mundo de extraterrestres.